El papel de la ecografía en las disfunciones del suelo pélvico

En nuestro centro de fisioterapia en Leganés, disponemos actualmente de un ecógrafo que utilizamos en las consultas de fisioterapia del suelo pélvico con 2 fines principalmente:

  • Para la valoración de la función del suelo pélvico: la imagen nos muestra el movimiento durante la contracción y su efecto sobre la vejiga y demás órganos.
  • Para aumentar la eficacia de las sesiones de tratamiento: hace posible que el paciente observe cómo contrae su musculatura, es decir, le da un feedback de lo que está haciendo.

En esta entrada vamos a hablar del uso del ecógrafo en el tratamiento. El objetivo de la fisioterapia es rehabilitar la función del suelo pélvico que, en líneas generales, consiste en conseguir un tono muscular de base apropiado y una capacidad de contracción eficaz. La forma tradicional de enseñar a realizar una contracción del suelo pélvico es a través de la palpación manual y el feedback verbal, es decir, comunicando al paciente con palabras una valoración de la calidad de la contracción realizada. Sin embargo, existe evidencia de que en muchos casos, la información verbal y táctil no son suficientes para los pacientes que pueden tener poca sensación de la contracción o deficiencia de control neuromuscular (1).

En estos casos, el fisioterapeuta puede utilizar un método de biofeedback como ayuda durante la realización de los ejercicios, que consiste en proporcionar al paciente información sobre la calidad de la contracción a través de la medición de algún aspecto cuantitativo o cualitativo de la misma, que se traduce en un estímulo sensorial que facilita el aprendizaje y la motivación del paciente. En la rehabilitación del suelo pélvico se han utilizado tradicionalmente diferentes métodos de biofeedback instrumental, como la información de presión ejercida por la musculatura recogida por una sonda manométrica o la de contracción muscular de una sonda electromiográfica. Sin embargo, la evidencia al respecto de la eficacia de estos métodos no es del todo concluyente. Una revisión sistemática del año 2012 de la Asociación Internacional de Uroginecología concluye que no se puede establecer la superioridad de entrenamiento de suelo pélvico aumentado con biofeedback tradicional (2).

La ecografía permite la observación de la contracción de la musculatura del suelo pélvico, tanto al fisioterapeuta como al paciente. La siguiente imagen muestra un corte sagital de una ecografía transabdominal realizada en nuestra clínica.

En esta imagen, se observa la vejiga de perfil y la contracción nos permite observar el movimiento ascendente del suelo pélvico cerrando la uretra.

Esta información visual ecográfica es una fuente de biofeedback que puede resultar ventajosa con respecto a las técnicas tradicionales. Existen algunos estudios realizados utilizando esta técnica, como el que vamos a comentar a continuación.

El estudio de Galea et al (3) es un ensayo aleatorizado que tiene como objetivo la comparación entre la palpación vaginal como método tradicional de biofeedback y la ecografía transabdominal (4) en la rehabilitación de la musculatura del suelo pélvico en mujeres mayores con incontinencia urinaria. Este estudio tiene una valoración de calidad de 7 en la base de datos PEDro.

La población de estudio consiste en 22 mujeres entre 60 y 85 años, que viven en una residencia, y presentan incontinencia urinaria de esfuerzo, de urgencia o mixta. Para el estudio se forman dos grupos, uno recibe feedback verbal usando la palpación vaginal y el otro feedback visual con ecógrafo. En el primer grupo se realiza la valoración manual del suelo pélvico en la 1ª visita, y en las siguientes se dan instrucciones verbales basadas en la observación inicial. Se pide a las pacientes que realicen una presión de cerrado más elevación. El grupo de ecografía recibe feedback visual que consiste en observar la elevación de la base de la vejiga, siendo del 100% del tiempo en la 1ª visita, y se va reduciendo hasta el 0% en la última. La duración de la intervención es de 10 semanas. Se realizan un número de mediciones para valorar la reducción de la incontinencia, siendo las más relevantes: el número de episodios de pérdida por semana y el test de 24 horas de pesado de la pérdida de orina. Las medidas se realizan antes y después del tratamiento y a los 3 meses.

El resultado del estudio es que el grupo de ecografía presenta una reducción considerable en el número de episodios por semana, por lo que los autores concluyen que puede ser efectivo para enseñar a realizar la contracción del suelo pélvico en este tipo de población.

Referencias

  1. Whittaker JL, Thompson JA, Teyhen DS, Hodges P. Rehabilitative Ultrasound Imaging of Pelvic Floor Muscle Function. Journal of orthopaedic & sports physical therapy. 2007; 37(8).
  2. Fitz Faní F, Magalhaes Fesende AP, Stupp L, Ferreira Sartori MG, Batista Castello MJ, Aquino Castro R. Biofeedback for the treatment of pelvic floor muscle dysfunction: a systematic review and meta-analysys. Int Urogynecol J. 2012; 23: p. 1495–1516.
  3. Galea M, Tisseverasinghe S, Sherburn M. incontinence, A randomised controlled trial of transabdominal ultrasound biofeedback for pelvic floor muscle training in older women with urinary. Australian and New Zealand Continence Journal. 2013; 19(2).
  4. Whittaker J. Ultrasound imaging for rehabilitation of the lumbopelvic region. A clinical approach: Elsevier; 2007.

Autor

IRENE PUEBLA HERNÁNDEZ. Fisioterapeuta especializada en suelo pélvico